Estoy muy feliz.
Un día, una amiga me dijo que me había seguido en mi viaje durante todo el año. Para ella era un año muy duro luchando contra el bicho malo. Largas horas de hospital, quimio, visitas, dolores, en casa de la cama al sofá y del sofá a la cama, miedos, tristezas… Y me dijo, nada más y nada menos, que para ella este blog había sido como “el aire que entra cuando abres una ventana”. Que le había dado ilusión y ganas de luchar y que se apuntaba los lugares que describo y que quiere ver cuando se ponga buena. Madre de Dios!!!! Qué impresión!!!!!
Pocas veces en mi vida he tenido una sensación de satisfacción tan grande. Recuerdo seguía chateando con ella mientras me caía la moquilla. A mi me gusta llorar cuando la sensibilidad se me desborda. Fue una pasada.
Y hoy tengo otra satisfacción enorme, no mayor porque es imposible, pero sí igual y en el mismo sentido. Hemos acordado una colaboración con ONCOLLIGA GIRONA, una gente que da soporte a los enfermos de cáncer de nuestra provincia con una humanidad y eficacia que te reconcilia con el género humano. Lluisa, Rosa, Carla… enormes seres. A partir de ahora Alas y Viento es suyo. Y vamos a hacer cosas, muchas cosas. De entrada, un link en la home de Alas y Viento para quien quiera dar algún dinerito. Ninguna obligación eh!? Pero si a alguien le sirve para algo este blog, pues me hace un favor… Y vamos a hacer más, mucho más. Os mantendremos informados. Sé que os va a encantar.
Alas y Viento, equipo, colaboradores y seguidores, todos, todos, desde ya, estamos en guerra. En guerra, persona a persona, trinchera a trinchera, contra el bicho malo. A partir de ahora, ni siquiera mencionaremos su nombre. Es el bicho malo, el mal bicho. Y le vamos a dar candela.
Estoy muy feliz.