La Junta de Castilla y León ha declarado Bien Intangible de Interés Cultural las máscaras de invierno, y la Federación Provincial de Mascaradas de Zamora, «MascaraZa», organiza el próximo 4 de junio una jornada de exposiciones, charlas, ponencias de antropología y todo lo relacionado con aquellas mascaradas de invierno que se celebran en Castilla y León.
Total, que el amigo José Javier Sánchez, Presidente de aquella Asociación, y Pilar Panero, profesora de Antropología Social y responsable de la Cátedra de Estudios sobre la Tradición de la Universidad de Valladolid, que es quien organiza el foro de esas jornadas, me han invitado a dar una charla sobre Máscaras del Mundo y participar en el evento. Y, naturalmente, yo, encantadísimo, me voy para allá.
Fíjate por donde, la última vez que estuve en Zamora fue el 16 de marzo del 2.020. Las fronteras se había cerrado el día anterior por la crisis del coronavirus con la declaración del «estado de alarma» y yo pasé a pie de Portugal a Trabazos y, de ahí, encontré un taxi que me llevo a una Zamora confinada y absolutamente desierta. Desde Zamora tome el último tren a Madrid y, de Madrid, el último AVE a Barcelona. Venía de la segunda etapa de mi Vuelta al Mundo truncada, radical y traumáticamente, por aquel mal bicho. Todo aquello lo explique en el post «Portugal (y 3) Un fin de viaje alucinante. La frontera y 1.000 km más».
Y fíjate, ahora vuelvo en circunstancias totalmente distintas y muchísimo más agradables. Muchas ganas.