Como en cada viaje, y màs en los viajes en solitario, la primera impresión es el miedo. Muchos le llaman «nervios», pero es miedo. Miedo a lo desconocido, a la soledad, a la nostalgia. Pues eso, lo primero que hay que hacer es dejar atrás el miedo. Alas y viento.
¿Por donde empezar? Por el principio.
La primera en la frente: a mi lado, en el avión, un oriental constipado. Cada 2 minutos, se sorbe los mocos. Estupendo. A la media hora le ofrezco klinex con mi mejor sonrisa. Me sale bien. ¡Cosa màs bonica!
Los indonesios son, en general, bajitos y delgadetes. Aquí, mi 1,72 y mis 65 kg son casi robustos. Parecen serviciales y buena gente, aunque su inglés es endiablado y, te entiendan o no, a todo te dicen que si. Ya en Yakarta, pido un par de piezas de pollo frito y, al primer bocado, me sale por la boca todo el volcán Krakatoa en erupción. ¡Ay Ay Ay, que el picante me va a dar bambú!
Este es mi segundo viaje a Indonesia. El primero fué hace 20 años y conocí Yakarta, Yogyakarta, Bali y Sulawesi. No fué un viaje aventurero, aunque lo recuerdo bonito y plàcido. El templo de Borobudur, las playas de Bali, un funeral en Tana Toraja. Lo dicho: viaje tranquilo. Este no tendrá nada que ver. Pretendo conocer el archipiélago de Nusa Tenggara, Kalimantan (Borneo) y, si puedo, Papúa.
Tras dos días de aviones y aeropuertos para llegar a Lombok, me pego un palizón de 5 horas en un artefacto, que algún día fué un microbús, y varias carreras en moto como paquete de indonesios suicidas entre el tráfico caótico de una carretera rodeada de selva. En los bordes, manadas de monos esperando pillar lo que los humanos tiran de los coches. Aquí, cultura ecológica, cero. Así llegó a Senaru y, enfrente, veo, por fin, el volcán Rinjani, mi primer objetivo.
El «pueblo», feo. En realidad por aquí no hay pueblos como los conocemos nosotros, sino insalubres asentamientos de casas/chozas/barracas al estilo africano que van creciendo a lo largo de la carretera. Feos y pobres. Las casas, por llamar de alguna forma a esas edificaciones en las que mezclan materiales de todo tipo, sirven para vivir y para comerciar y toda la amalgama es de una suciedad tremenda donde se hacinan niños, mujeres, hombres, gatos, perros, loros, gallinas y lagartos de forma penosa. Pobreza de repelús. Tercer mundo a tope. La miseria es lo primero que golpea a un occidental en viaje. Saliendo de tu zona de confort, tu conciencia se remueve incómoda ante las tremendas desigualdades que, en vivo y en directo, no tienen nada que ver con lo que te enseñan en la tele.
El volcán, en cambio, imponente. Habrá que verlo pero eso está muy, muy alto.
La primera pensión donde voy a parar es…¡buf! Por explicarlo rápido rápido, tipo celda de clausura sin crucifijo siquiera, con un cuarto de baño con ducha directa al suelo. Custodia la entrada un sapo enorme que me mira con indiferencia. El cuadro se completa con una cama enorme con faldones dorados a conjunto con una cortina con borlas que haría las delicias de mi abuela. Esa misma tarde encuentro para mañana una cabaña de madera con vistas magníficas al volcán.
Todo el viaje hasta aquí me ha costado 15 euros y las habitaciones 12 euros. Si viajas mucho no te puedes permitir grandes comodidades como traslados en 4×4 .y has de espabilar con el mismo transporte que los nativos. Además, si me lo permitiera, mis 10 apellidos catalanes se cabrearian como fieras y podrían llegar a desheredarme. Sí, soy bastante agarrado.
Al tercer día llego a Sembalun Lawang para la ascensión al cráter del Rinjani. Serán 2 días, con pernocta en una tienda de campaña del campo base.
Senyor Nacho ja corres pel mon.? Fantastic estarer pendent del teu diari i esperut que tot vagi al 100%
Hola Jordi. Venvingut al blog! Avui o demà nou capitol. Estic lesionar (fisura a una costilla) y he de fer repos find q pugui carregar la mochilla altre cop. Récords a tots. Salut.
Que buen viaje, querido amigo!!!!
Que la aventura, salga redonda!!!!!!!!!!
Siempre un gran placer leerte.
Abrazo argento con tintes familiares!!!
Hola Gus. Disfrutando del viaje vuelvo el 15-12 y quisiera volver a irme antes d 3 meses. No quiero parar. Si planeas algún viaje dímelo. Yo estaba pensando quizás en la ruta 66 en coche (eso a ti estoy seguro q t gustaría). Paradas en lugares míticos. Algún Parque Nacional. Un par de meses. O quizás en ir d San Diego a Mejico igual en coche. No se. Dame novedades a ver si coincidimos. En junio o Julio intentaré Transiberiano y Japón. Y quizás ya empalmo con vuelta al mundo…